Al menos un centenar de peces aparecieron muertos ayer en el arroyo Pinazo, en su cruce con la ruta 8.
Sorpresa e indignación causó ayer entre los vecinos la novedad de que cientos de peces flotaban muertos en las aguas del arroyo Pinazo, justo debajo del puente de la ruta 8, y a escasos metros del desagüe por el que la empresa Granja Tres Arroyos vuelca sus efluentes.
Según consignaron habitantes del barrio ubicado sobre ambas márgenes del curso de agua, no es habitual encontrar peces sin vida en el arroyo, a pesar de que aseguran que presenta un alto grado de contaminación fundamentalmente en algunos tramos.
“Yo paso en bicicleta todos los días por el puente para ir a trabajar y es la primera vez que veo algo así; la verdad que me llama mucho la atención. Esta fábrica hace poco que volvió a trabajar y justo los peces muertos están al lado del caño por el que tiran toda su basura al río”, explicó Arturo, un vecino que pasaba ayer a la tarde por el lugar.
De acuerdo a lo que pudo constatar El Diario, eran más de cien los peces muertos que flotaban en el agua de ambos lados del puente. Justo debajo de la ruta 8, el agua parecía obstruida por ramas y basura.
Al ser consultada por El Diario, Graciela Capodoglio, de la asociación ecologista Patrimonio Natural que gerencia la Reserva Natural de Pilar, precisó que hace un mes aproximadamente la ONG llevó adelante un relevamiento del estado del agua del arroyo y la sorpresa fue grata al advertir que el Pinazo se encontraba en “perfecto” estado.
“En esa oportunidad, advertimos que a la altura de la calle Chile al fondo, detrás de la Escuela 16, el estado del arroyo era perfecto. Incluso, comprobamos que había presencia de almejas de río, y eso es un muy buen síntoma porque ese tipo de almejas son las primeras que desaparecen cuando hay algún nivel de contaminación y, a partir de ahí, todos los seres vivos que se alimentan de ellas”, destacó la ambientalista.
Por lo tanto, Capodoglio insinuó que la mortandad de peces podría deberse a la reciente puesta en marcha de la planta de la avícola Granja Tres Arroyos y el consiguiente vuelco de efluentes al Pinazo, por lo que instó a las autoridades municipales y provinciales a que, con carácter de urgente, realicen los controles correspondientes sobre los desechos que la empresa arroja al arroyo.
“El Pinazo es un arroyo que tiene mucha vida. Por lo tanto, con sólo dejar de contaminar, se sanea sólo en poco tiempo. Las empresas no tienen la obligación de contaminar; haciendo las cosas como corresponde son totalmente compatibles con el medio ambiente. Y el Estado tiene que cumplir con su obligación de controlarlas”, manifestó la ecologista.
El más contaminado
Un estudio realizado tiempo atrás por la Asociación Patrimonio Natural reveló que el río Luján, en el que desembocan los arroyos Pinazo y Burgueño tras fundirse ambos en el arroyo Escobar, es el tercero más contaminado del país. En ese ranking de la muerte, el Luján que atraviesa el distrito sólo es superado por el Riachuelo y el río Reconquista.
Esos resultados preocupantes fueron corroborados por los integrantes de la organización durante una navegación que llevaron a cabo a fines de enero desde la desembocadura del río, en la localidad de Suipacha, hasta el tramo que cruza el Partido de Pilar.
De acuerdo a esa recorrida, la asociación pudo concluir en que el río Luján se encuentra contaminado como en sus peores épocas, debido a que se registró en el último tiempo la mortandad de millares de peces en el área del curso de agua que surca Pilar y se hallaron sospechosas costras de celulosa que cubren las costas. Las miradas apuntan al Parque Industrial, donde existe una papelera que cuenta en su haber con varias infracciones por vuelcos no permitidos.
Aguas grises, gases que se desprenden del lecho en forma de burbujas, enormes cantidades de desperdicios flotando es el paisaje que se advierte –según los ecologistas- al navegar las aguas del tramo del río que le corresponde al distrito.
Este negro panorama pudo advertirse el último fin de semana de enero, en el marco del Día Internacional de los Humedales, cuando los voluntarios de la Reserva Natural de Pilar realizaron una travesía en kayak de relevamiento y concientización por el río Luján.
Fuente: Diario Regional de Pilar
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