Techo es una organización civil que tiene como uno de sus principales
objetivos superar la pobreza en asentamientos informales de los diferentes países
de América Latina.
A partir de un informe realizado por TECHO en conjunto con otras organizaciones,
se relevó que alrededor de medio millón de personas viven una situación de
emergencia habitacional.
En diálogo con el programa radial “Encuentro con las
Noticias”, Francisco Ferrario, Director Regional de Techo Buenos Aires, remarcó
los principales datos arrojados por el relevamiento “Por suerte el año pasado
se pudo concretar lo que fue el Registro Nacional de Barrios Populares, que lo hicimos
nosotros junto a otras organizaciones, estuvo la CTEP, la CCC, Barrios de Pie,
Cáritas y demás y salimos a relevar todos los barrios populares del país y en provincia
de Buenos Aires salimos a chequear datos que nosotros ya teníamos de los
barrios. Y eso nos da que hay casi medio millón de personas que viven en
villas, en asentamientos o barrios populares, que son personas que no tienen
acceso a un hábitat digno, no tienen acceso a los servicios básicos, no tienen
seguridad en la tenencia de la tierra, es decir podrían sufrir un desalojo.
Y muchas de esas familias viven en una situación de emergencia habitacional muy
extrema, estamos hablando de familias que viven en piso de tierra, que tienen
de pared un cartón, una lona y demás; y creemos que hoy en día eso no debería
ni existir”.
La organización social TECHO elaboró un proyecto que prevé
la construcción masiva de viviendas de emergencia en los barrios populares. La propuesta
fue presentada ante el Ejecutivo provincial y esperan definiciones para poder avanzar
con el diseño de las obras.
Ferrario, explicó la propuesta “Lo que proponemos es que nuestra vivienda sea
una respuesta frente a esa emergencia habitacional, que sea un compromiso real
del gobierno provincial y de los gobiernos municipales el de apaliar y en
atacar esa emergencia con cosas concretas. (…) Lamentablemente lo que vemos que
pasa, en muchas oportunidades, es que frente a una tormenta o frente a un desalojo
o frente a una cuestión más catástrofe natural, los municipios acercan algunas
chapas, algunos ladrillos pero no una solución concreta.
(…) Nosotros no queremos, ni pretendemos que la vivienda que ofrecemos y esta
casilla de madera que ofrecemos como respuesta a la emergencia reemplace a las
soluciones definitivas, ni queremos que las familias vivan ahí para siempre
pero si entendemos que puede ser un punto intermedio para que no haya ninguna
familia viviendo en esta emergencia”.
Finalmente, el Director Ferrario remarcó que es sumamente
importante que además de acompañar este proyecto, los gobiernos provinciales y
municipales den respuestas y soluciones concretas a las familias que viven con
ésta problemática “Para solucionar realmente la problemática tan estructural de
la falta de acceso al hábitat se necesita se requiere una batería de proyectos
y de medidas. No es solamente una cuestión, una ley o una iniciativa completa. Y
ni hablar que hay que ir por ver el caso de cada uno de esos barrios, ver
cuánto hace que están las familias viviendo ahí. A nivel nacional el promedio
de antigüedad de los barrios populares tiene entre 25 y 30 años”.
Compartimos la entrevista completa
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